Éstos pueden ser muy distintos entre sí, tanto en complejidad como en calidad gráfica y en temática. Con el tiempo algunos han ido incorporado valores educativos y pedagógicos.
Existen estudios que avalan el uso de los videojuegos como medio terapéutico en el abordaje de personas con desórdenes mentales, tales como la esquizofrenia. Estos estudios reportan un aumento significativo del contenido de materia gris en el hipocampo derecho, la corteza prefrontal y el cerebelo lo que mejora las funciones cognitivas. Cabe destacar que el hipocampo es responsable de formar, organizar y almacenar recuerdos; que la corteza prefrontal interviene en la toma de decisiones, la planificación, el control de los impulsos y la resolución de problemas, y el cerebelo controla la coordinación de los movimientos y el equilibrio.
La práctica del videojuego como instrumento en la rehabilitación psicosocial favorece la recuperación de habilidades y capacidades para la integración en paralelo a otras intervenciones rehabilitadoras. Por medio de esta actividad lúdica potenciamos las habilidades sociales en la interacción con otros participantes, el manejo de los síntomas negativos y la estimulación de habilidades cognitivas y psicomotoras.
Al realizar esta práctica en un contexto como en el centro de rehabilitación psicosocial permite regular el tiempo de uso y compartir el juego con otros. Además, los videojuegos se vuelven atractivos, ya que poseen estímulos sensoriales de tipo auditivo y visual que generan una atmosfera motivadora para el participante.
La superación de un reto entrega un desafío para la persona, logrando encontrar estrategias para la resolución de problemas y manejo de emociones tales como ira, frustración, ansiedad y baja autoestima.