“Estas cifras sólo son una pequeña muestra de lo que implica la violencia de género. No por nada la región del Bío-Bío es la segunda con más denuncias de este tipo (20,9%). Sin duda, estos datos evidencian un grave diagnóstico en términos de Salud Mental, y ello debe abordarse desde una mirada integral”, explica la Dra. Nathalie Navarro, médico psiquiatra y Directora Médica de MirAndes Concepción.
Con este telón de fondo, y en el marco del Mes de la Salud Mental, este 29 de octubre en Concepción se desarrolló una jornada de profundización en torno a la violencia de género, titulada jornada “Salud Mental y Mujer”, con especial foco en el riesgo suicida al que se exponen las víctimas.
En este contexto, especialistas del Programa Poder de Mujer abordaron la relación entre psiquiatría y salud mental en la mujer, además de técnicas de abordaje en mujeres con problemática suicida.
“Las víctimas de violencia de género llegan a la conducta suicida impulsadas por factores como eventos negativos en su vida, síntomas de depresivos o ansiosos, baja percepción de apoyo y la incitación directa. En Chile la incitación directa al suicidio aún no está penalizada, a diferencia de muchos otros países”, detalla.
En este contexto, la especialista es enfática en señalar que “el suicidio es un problema de salud pública a nivel mundial, nacional y regional; y es la causa de la mitad de las muertes violentas en el mundo. En el caso de la violencia de género es clave poner atención en el riesgo suicida que acompaña a quienes enfrentan esta realidad”, sostiene.
Junto con revisarse estrategias de abordaje en la atención de víctimas de violencia de género con ideación suicida, durante la jornada se expuso la necesidad de generar redes entre los diferentes actores del ámbito público y privado, para ofrecer una mejor contención a quienes son parte de esta dura realidad.
PROGRAMA PODER DE MUJER
La jornada “Salud Mental y Mujer” coincide con el lanzamiento del Programa Poder de Mujer, de Cetep – MirAndes, que ofrece intervención, tratamiento y/o contención a mujeres mayores de 16 años, que hayan vivido algún tipo de violencia intrafamiliar o de pareja.
