A menos de una semana para que se cumpla un año del primer caso activo de COVID-19 en nuestro país, se puede decir que, la pandemia ha traído consigo innumerables secuelas y nuevas condiciones a las cuales poco a poco las personas se han ido adaptando.
A pesar de que la población se ha moldeado eficazmente a la “nueva normalidad”, conceptos como: Miedo, preocupación y estrés, son respuestas naturales en momentos en los que se enfrenta a la incertidumbre, a lo desconocido, a situaciones de cambios o crisis.
Para la Organización Mundial de la Salud, es comprensible que la gente experimente estos sentimientos en el contexto de la pandemia COVID-19, porque a pesar de ser un virus que ataca la salud física, perjudica significativamente la Salud Mental.
En ese contexto, el impacto de importantes cambios en nuestra vida cotidiana, como el distanciamiento físico, el trabajo desde el hogar, el desempleo temporal, son sin duda situaciones que alimentan la incertidumbre.
Precisamente, la psicóloga del centro de Salud Mental, MirAndes Viña del Mar, Antonieta Pérez, afirma que “estamos todos y todas viviendo un proceso de readaptación y adecuación ante lo nuevo y lo dudoso”.
Además de todo este proceso mental, también viene la presión por “delimitar, demostrar, resguardar e incluso planificar para sentirnos y hacernos partes de un ritmo que, en muchas ocasiones, nos sobrepasa y nos vemos saturados”, asegura la especialista.
Recomendaciones
La profesional de MirAndes Viña del Mar es enfática sobre la importancia de trabajar en el cuidado de la salud emocional de cara a no ser sobrepasados por la incertidumbre.
“La invitación es a hacernos cargo de nuestro sentir, accionar y pensar, que no nos sobrepase la incertidumbre y combatamos la sintomatología que nos trae esta sensación, compartiendo y haciéndonos cargo de nuestro padecer, tomando consciencia de lo que soy, que y quienes me rodean”, plantea Antonieta Pérez.
Asimismo, la psicóloga de MirAndes subraya que es clave enfrentar las situaciones que se presenten desde una posición de apertura, “perdiendo la vergüenza a pedir ayuda y herramientas a profesionales de la salud. Estamos todos y todas viviendo un proceso de re-adaptación y adecuación ante lo nuevo y lo dudoso”, indica Pérez.
3 claves para ganarle a la incertidumbre
- Reconocer y aceptar emociones
- Compartir lo que nos ocurra con otros
- Perder vergüenza a solicitar ayuda profesional
