Mi experiencia en el Hospital de Día fue buena. En un principio difícil ya que soy una persona de 68 años, por eso fue difícil adaptarme a los talleres y otras actividades. Pero principalmente la experiencia fue positiva. Fui muy bien acogido por todo el personal del centro, donde se me entregó cariño, respeto y dedicación. Me voy contento, mucho mejor de lo que llegué, y agradecido.